martes, 24 de junio de 2014

APARECE EL LIBRO “DE CADENAS, MIGRANTES Y JORNALEROS: LOS TERRITORIOS RURALES EN LAS CADENAS GLOBALES AGROALIMENTARIAS”. Andrés Pedreño Cánovas (coord.) Editorial Talasa, 2014.


A mediados de marzo de 2012 los investigadores que han escrito este libro se reunieron en Montevideo en torno al Seminario Internacional “Migraciones, Cadenas Globales Agrícolas y Desarrollo Rural” (14 y 15 de marzo de 2002). Fue un momento, y este libro es reflejo de ello, de cristalización de una red transoceánica de investigadores que durante largo tiempo habían venido manteniendo encuentros e intercambios a lo largo de una geografía científica que articulaba Neuquén, Murcia, México, Buenos Aires… y Montevideo.
El campo uruguayo, dadas sus transformaciones en curso, compuso un escenario privilegiado de acogida de las discusiones que tuvieron lugar en el Seminario. Como tuvimos ocasión de comprobar en una visita por el campo de Salto, el paisaje rural tradicional uruguayo –con sus extensas superficies de pasto para ganadería y surcado por ríos de aguas abundantes- ha experimentado en el contexto de la globalización una serie de cambios a través de una triada de especializaciones conectadas con cadenas globales: plantaciones de causarinas y eucaliptos para la industria forestal canadiense y norte-europea; campos de soja para la producción de combustible vegetal; y hortifruticultura de exportación. Una nueva figura social ha empezado a expandirse por el agro uruguayo: el trabajador agrícola asalariado.
Visita del equipo de investigación a un empaque de cítrico, Salto (Uruguay)

En Salto, tuvimos ocasión de conversar con sindicalistas del campo, agricultores, gerentes de grandes empresas… visitando fincas de naranjos, arándanos y horticultura, así como varios almacenes de empacamiento de productos agrícolas para exportación. In situ, tuvimos la oportunidad de observar el trabajo de las cuadrillas de jornaleros recolectando naranja e inclusive comparar sus ritmos diferenciados entre la cuadrilla a destajo bajo la dirección de un intermediario –ritmos frenéticos, conversación cero, trabajo tenso- y una cuadrilla a jornal contratada directamente por la empresa –ritmos pausados, risas y conversación, relajación-. Estas mismas estampas son las que encontramos hoy en la diversidad de territorios de lo que llamamos globalización agroalimentaria. Esas mismas lógicas de trabajo que veíamos desarrollar ante nuestros ojos al norte del río Uruguay no son otras que las que venimos estudiando en México, Murcia, Brasil o Argentina, y el lector de este libro tendrá oportunidad de comprobar que en esa diversidad de geografías del trabajo agrícola son muchas las similitudes y afinidades. Por ello hablamos de convergencias globales.

Recolectores destajistas en una finca de naranja, Salto (Uruguay)

De hecho, escuchando en aquella visita las discusiones con sindicalistas en las que participamos en la Universidad de Salto, así como las conversaciones con gerentes de empresas agrícolas, asistimos a ese momento privilegiado en el que en la agenda pública se construye el “problema de la escasez de mano de obra agrícola en el campo” y el “problema de la indisciplina del trabajo y la elevación de costes laborales” (con el nuevo gobierno de izquierdas, los sindicatos reconocían un satisfactorio incremento del salario y de mejora de las condiciones de vida por primera vez en mucho tiempo…). De tal forma que se manejaba como solución a ambos problemas el recurso a las migraciones transfronterizas (norte de Argentina), al tiempo que los sindicatos presentaban condiciones a tal opción. Escuchando estos debates, comprendí mucho más lo que nuestros estudios sobre la hortofruticultura de exportación en la Región de Murcia habían venido mostrando: que las condiciones de posibilidad de este enclave agroexportador se hicieron viables cuando se solucionaron esos mismos “problemas” gracias al cuantioso flujo migratorio que desde mediados de los 80 ha venido regando los campos de abundante fuerza de trabajo procedente de Marruecos, Ecuador, Bolivia, etc. 
Finca de arándanos para exportación, Salto (Uruguay)

Precisamente estas convergencias globales posibilitan una metodología comparativa de investigación sobre cinco ejes conceptuales que son los que estructuran los diferentes capítulos de este libro:
Eje 1: Cadenas globales, territorios de producción y estrategias empresariales. En este eje se abordan la conexión global-local de los enclaves agroexportadores, la construcción histórica de ese territorio y los actores implicados en la formación del nexo global, así como las estrategias empresariales para adaptarse a la norma de competencia. Los capítulos 1 (Andrés Pedreño) y 2 (Norma Steimbreger) de este libro se corresponden con este eje.
Eje 2: Reclutamiento de fuerza de trabajo y composición social de los “nuevos jornaleros”: mujeres y colectivos migrantes. En este eje se aborda la cuestión de la disponibilidad de fuerza de trabajo gestionada en condiciones salariales y el protagonismo que en la misma tienen los dispositivos de feminización y etnificación del trabajo. El capítulo 3 (Alicia Reigada) de este libro se corresponde con este eje.
Eje 3: Las condiciones de trabajo y los procesos de control en la producción. En este eje se atiende a la organización del trabajo y de la producción con el fin de evaluar si existe o está emergiendo una norma de empleo específica del sector agrícola. Esta consideración del empleo como norma social apunta a las regulaciones políticas y normativas que lo conforman. Los capítulos 4 (Carlos de Castro), 5 (Alberto Riella, Mauricio Tubío y Rosario Lombardo) y 6 (Germán Quaranta) de este libro se corresponden con este eje.
Eje 4. Las estrategias de reproducción social y de socialidad de los trabajadores. En ese eje se incluye la cuestión de los hogares y los recursos disponibles de los trabajadores y sus familiares para garantizarse la reproducción social, además de las estrategias de socialidad y asentamiento. Los capítulos 7 (Elena Gadea. Antonio J. Ramírez y Joaquín Serrano), 8 (Sara Lara, Kim Sánchez y Adriana Saldaña) y 9 (Mónica Bendini) se corresponden con este eje. 
Eje 5: Nuevas formas públicas y privadas de regulación transnacional de las relaciones laborales. El objetivo de este eje es analizar qué texturas de redes de regulación laboral existe en nuestro contexto de estudio y las implicaciones de las nuevas formas de regulación transnacional en las condiciones laborales de los trabajadores y en su organización política y capacidad de negociación sobre sus derechos y sus condiciones de trabajo. Interesa analizar cómo la implantación de los sistemas de calidad, de buenas prácticas agrícolas (BPA),  de responsabilidad social empresarial (RSE), códigos de conducta, etc. han influido en la regulación de las relaciones laborales y en las condiciones de trabajo. Al mismo tiempo, conocer  en qué medida estos procesos han reconfigurado las relaciones de los distintos actores entre sí (grandes empresarios, pequeños y medianos agricultores, organizaciones empresariales, cooperativas agrarias, sindicatos, trabajadores y administraciones, compradores, organizaciones de consumidores) y su capacidad de poder e influencia. Los capítulos 10 (Natalia Moraes e Isabel Cutillas) y 11 (Josefa Salete Barbosa Cavalcanti) se corresponden con este eje.


miércoles, 4 de junio de 2014

NUEVO ARTÍCULO DEL EQUIPO ENCLAVES: "INMIGRACIÓN, CRISIS DEL SUR DE EUROPA Y SOSTENIBILIDAD SOCIAL DE LAS ESTRATEGIAS DE DESARROLLO. EL CASO DE LOS ENCLAVES PRODUCTIVOS DE AGRICULTURA INTENSIVA".

Desde el equipo de ENCLAVES continuamos con la labor de difusión de los resultados preliminares de nuestro proyecto de investigación en curso.  
En esta ocasión con la publicación del artículo:
Ha sido escrito por nuestros compañeros Carlos de Castro, Elena Gadea y Andrés Pedreño para el número 11 de la revista TRABAJO que tiene por título genérico "Migración global: el mundo de precariedad y vulnerabilidad laboral", editada por el Seminario Permanente de Sociología del Trabajo y de la Empresa (SOTRAEM).

Resumen del artículo:

La configuración de enclaves de producción agroexportadora ha constituido una de las estrategias de inserción de algunas regiones del Sur de España en la economía global. Dada la centralidad de los trabajadores migrantes en los resortes productivos y económicos de dichos enclaves, este artículo se propone rastrear la metamorfosis de la condición inmigrante en el contexto de la actual crisis, como indicador de la sostenibilidad social de la opción de desarrollo basada en la producción intensiva y globalizada de frutas y hortalizas en fresco, así como de las contradicciones entre la norma de competitividad y la cohesión social.